Crianza respetuosa en la escuela: qué significa realmente y qué no.
En los últimos años, el término crianza respetuosa ha ganado popularidad entre las familias que buscan una educación más humana y consciente. Sin embargo, también ha generado confusiones: algunas personas creen que implica dejar que los niños hagan lo que quieran o que se trata de un modelo para alumnos con necesidades especiales.
La realidad es que la crianza respetuosa no es permisividad ni educación especial, sino una filosofía educativa basada en el respeto, la empatía y la conexión emocional. En este artículo te explicamos qué significa realmente, qué no, y cómo se vive día a día en escuelas como Instituto Savia.
1-Qué significa realmente la crianza respetuosa en la escuela
1. Acompañar las emociones, no ignorarlas
La crianza respetuosa parte de reconocer lo que niñas y niños sienten y ayudarlos a entender sus emociones.
En lugar de decir “no llores”, se acompaña con frases como:
“Veo que estás triste porque tu dibujo se rompió. Entiendo que pusiste mucho esfuerzo.”
Esto enseña que todas las emociones son válidas, pero que también podemos gestionarlas con calma y guía.
2. Poner límites con amor y consistencia
Crianza respetuosa no significa dejar que los niños y niñas hagan todo lo que quieran.
Se establecen límites claros y consistentes, pero con respeto y explicación.
Ejemplo cotidiano:
Si un niño o niña no quiere recoger los materiales, en lugar de imponerlo con un “porque sí”, se le explica:
“Guardamos los colores para que mañana todos podamos usarlos. Te ayudo con los primeros.”
Así, comprende la razón detrás de la norma y aprende responsabilidad sin miedo.
3. Fomentar la autonomía y la toma de decisiones
En este enfoque, los niños y niñas aprenden a elegir y resolver problemas por sí mismos con acompañamiento.
Por ejemplo, la maestra puede preguntar:
“¿Prefieres comenzar con música o con lectura hoy?”
Esto les da voz y participación, fortaleciendo su confianza y autoestima.
🚫 Lo que NO es crianza respetuosa
1. No es una educación sin límites
A veces se piensa que los niños y niñas hacen lo que quieren, pero es al contrario.
Una escuela respetuosa enseña que la libertad va acompañada de responsabilidad.
En Savia, los límites se aplican con coherencia, nunca con castigos ni gritos. Por ejemplo, si un niño o niña interrumpe la clase, la maestra no lo excluye, sino que lo invita a colaborar en la siguiente actividad para retomar el grupo desde lo positivo.
2. No es una educación especial
Aunque ambos enfoques valoran la individualidad, la educación especial atiende a niñas y niños con condiciones o diagnósticos específicos mediante apoyo profesional constante (terapia de lenguaje, psicología, etc.).
En cambio, la crianza respetuosa acompaña el desarrollo socioemocional de todos los niños dentro de un entorno regular, sin requerir intervención terapéutica.
💬 En Instituto Savia, respetar el ritmo individual no significa brindar atención clínica, sino ofrecer un espacio donde cada niño o niña crece con guía, empatía y estructura.
3. No es permisividad
Una escuela respetuosa no elimina la disciplina, sino que la redefine.
Se enseña desde la reflexión, no desde el miedo.
Por ejemplo, si una niña empuja a su compañero, la maestra no la regaña, sino que le dice:
“Sé que querías el juguete, pero empujar lástima. Vamos a buscar una forma de pedirlo con palabras.”
Así se fomenta la empatía y se enseña a reparar.
Conclusión
La crianza respetuosa no es un método sin estructura ni una educación especial, sino una forma de enseñar basada en la empatía, la escucha y los límites amorosos.
Es acompañar, guiar y confiar en las capacidades de cada niña y niño para aprender y crecer felices.
Si buscas una escuela en Mérida donde tu hijo o hija aprenda con respeto, alegría y conexión emocional:
👉 Agenda tu visita a Instituto Savia y conoce cómo vivimos la crianza respetuosa día a día.