¿Por qué elegir una escuela con inglés, arte, música y yoga desde pequeños?
Al buscar escuela para tu hija o hijo es normal preguntarse:
“¿De verdad vale la pena que tengan inglés, arte, música y yoga desde tan pequeños?”
La respuesta es sí, porque estas áreas aportan habilidades para toda la vida, no solo contenido académico.
1. Inglés: abrirles puertas al mundo
El inglés temprano se aprende jugando y de forma natural.
En clase saludan con “¡Hello!”, cantan y piden materiales con frases sencillas. Sin presión, el idioma se vuelve parte del día.
Beneficios: oído bilingüe, seguridad para comunicarse y facilidad futura para aprenderlo.
2. Arte: expresar y crear sin miedo a equivocarse
El arte permite imaginar, explorar y expresar emociones.
Pintan con acuarelas lo que sienten o imaginan. No hay “correcto o incorrecto”, solo creatividad.
Beneficios: creatividad, motricidad fina y expresión emocional.
3. Música: aprender con ritmo y emoción
La música impulsa el lenguaje, la memoria y la convivencia.
Cantando con palmas o usando instrumentos suaves, niñas y niños coordinan, recuerdan letras y trabajan juntos.
Beneficios: atención, lenguaje, memoria y socialización.
4. Yoga: calma, autocuidado y regulación emocional
El yoga no busca posturas perfectas, sino enseñar equilibrio entre cuerpo y emociones.
Después del recreo, realizan una respiración sencilla para volver a la calma. Aprenden a autorregularse sin regaños.
Beneficios: autoestima, autocontrol emocional y bienestar.
Un enfoque alineado con la crianza respetuosa
Estas actividades acompañan el desarrollo emocional y respetan el ritmo individual. Una escuela respetuosa cuida mente, emociones y cuerpo, no solo calificaciones.
Elegir una escuela con inglés, arte, música y yoga es apostar por una formación completa y humana.
Les da herramientas para comunicarse, crear, sentir y cuidarse.
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